🏍️ ¿Sabes la historia que hay detrás de la marca Honda?
Cuando pensamos en grandes marcas, a veces olvidamos que, detrás de cada una, hay personas reales. Personas que empezaron con poco o nada. Que cometieron errores, fueron rechazadas, vivieron crisis… y aún así, no se detuvieron.
Este es el caso de Soichiro Honda. Y su historia es mucho más que la de una empresa: es la historia de una actitud ante la vida.
🚴 De un taller de bicicletas a un gigante global
Honda nació en 1906 en una pequeña aldea japonesa. De niño, su pasión por la mecánica ya era evidente: pasaba horas en el taller de bicicletas de su padre, desmontando y arreglando piezas.
A los 15 años se mudó solo a Tokio para trabajar como aprendiz en un taller mecánico. No tenía estudios formales, pero sí una enorme curiosidad y una gran ética de trabajo.
Con los años, fundó su primera empresa para fabricar segmentos de pistón con la esperanza de vendérselos a Toyota. Pero los primeros intentos fallaron: los rechazaron por mala calidad.
¿Su respuesta? Volver a formarse, estudiar ingeniería y mejorar. Más tarde logró convertirse en proveedor de Toyota.
Sin embargo, la Segunda Guerra Mundial destruyó su fábrica. Y cuando quiso reconstruirla, un terremoto arrasó lo que quedaba.
🔥 Renacer de las cenizas
Muchos lo habrían dejado ahí. Pero él no. En 1946, fundó el Honda Technical Research Institute, donde comenzó a transformar bicicletas añadiéndoles pequeños motores. Así nació el germen de la futura Honda Motor Co., que en 1949 lanzaría su primera motocicleta completa: la Honda Dream.
🌍 Hoy, un símbolo global
Hoy, Honda está presente en más de 150 países, con una facturación superior a 120.000 millones de dólares anuales (2023) y más de 200.000 empleados en todo el mundo. Pero lo más relevante de todo no es su tamaño, sino cómo empezó.
📌 Lecciones clave de su historia:
- Aprender haciendo: Soichiro Honda no siguió el camino convencional. Aprendió con las manos, cometiendo errores y mejorando sobre la marcha.
- Caerse y levantarse: Guerras, catástrofes naturales, fracasos empresariales… su historia está llena de obstáculos.
- Adaptarse para seguir creando: Del motor a la bicicleta, de la bicicleta a la moto… luego vendrían los coches, los aviones y hasta los robots.
- Tener un propósito: No era solo fabricar vehículos, sino transformar la vida de las personas a través de la tecnología y el movimiento.
“El éxito representa solo el 1% del trabajo, que resulta del 99% llamado fracaso.” — Soichiro Honda
🚀 ¿Por qué compartimos esta historia en La EJE?
En La EJE compartimos estas historias con nuestro alumnado, porque creemos que inspiran de verdad. No son cuentos de hadas. Son vidas reales, con tropiezos y decisiones valientes.
Y muestran que, cuando alguien cree en su idea y se compromete con su propósito, los límites se amplían. Porque lo más valioso no es lo que una persona logra… sino lo que fue capaz de superar para llegar hasta allí.